Una mujer con tacones

Si los tacones te hacen perder la perspectiva del mundo
a ras de suelo, y no miras, sino que sugieres.
Si cuando sonríes es por obligación, o justificas un fin
y cuando miras lo haces por encima del hombro.

Si el rímel te emborrona la visión de la realidad.
Si buscas más envidia que la que te tienen
y no engañada, engañas.

Si no eres buena, y no finges ser mejor de lo que eres,
si al hablar exageras lo que quieres
y no propones sino que exiges.

Si provocas, y no intentas agradar,
si al andar te yergues y avanzas el pecho
y agilizas los tacones, y besas el aire.

Si tu cuenta pasó ya del treinta y siete,
si sólo sonríes para hacer fruncir el ceño
y no te rebajas a pesar del sofismo del orbe encanallado.

Si nunca arriesgas ni te llenas de alegría
porque tus apuestas siempre se sellan sobre seguro
y no te lanzas a la pelea, sino que la gozas
sin importarte las secuelas de los demás.

Muchos de los de esta tierra serán de tu dominio,
y mucho mas aún,
serás una femme fatale, hija mía.

2 opiniones en “Una mujer con tacones”

  1. Los tacones permiten también mejorar la perspectiva de la vida… una mujer algo introvertida que se trepa en un buen par de tacones y lleva una considerable dosis de rimel, bien puede convertirse un momento en la femme fatale que su hombre disfrutara como nunca y de la que ella no sabia que fuera capaz de ser…
    Una inteligente mujer puede robarse el mundo de hombres abusivos si, para presentar su propuesta se trepa en un par también…
    Finalmente alguien de estatura no muy favorecida, como yo, puede agrandar su 1.60m tal vez unos 10cm que le hagan sentirse mas cerca del cielo…

    En fin… que todo en esta vida tiene su lado bueno y su no tan bueno….

    Saludos y mis respetos!!

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